La recepcionista a la que querían que se pusiera zapato de tacón en la oficina y se fue para la casa

Las cosas no comenzaron bien para la recepcionista Nicola Thorp en su nuevo trabajo temporal en una importante firma auditora en el distrito financiero de Londres.

Y es que su vestuario fue, quizás, lo primero en ser sometido a auditoría aquella mañana. Y sus zapatos bajos no pasaron la prueba.

Thorp asegura que la empresa, PricewaterhouseCoopers (PwC), le dio dos opciones: te vas a comprar unos zapatos tacón alto - de 5 a 10cm- o te vas a casa sin sueldo.

"Les dije: 'Si me pueden dar una razón por la cual llevar zapatos bajos va a impedirme hacer mi trabajo, entonces está bien'. Pero no pudieron. Y esperaban que hiciera un turno de nueve horas llevando y trayendo clientes a las salas reuniones. Les dije que simplemente no me podría en tacones", señaló.

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Considerando que se trataba de un requerimiento discriminatorio y sexista, la decisión de Thorp fue irse a casa.
Hacerlo ilegal

El incidente tuvo lugar en diciembre pasado.

Pero según Thorp, tras comentarlo en sus redes sociales se dio cuenta de que otras personas pasaban por situaciones similares y que el caso debía ser denunciado.

Profesionales a las que se les pide maquillaje o uñas pintadas, mujeres con nueve meses de embarazo a las que se les exige trabajar en tacones, incluso hombres que deben trabajan en compañías de eventos trasladando mesas, sillas o bolsas de basura de camisa blanca y corbata, son algunos de los casos que fueron comentados por lectores de la BBC en inglés.

Una petición online para ilegalizar el requerimiento de usar zapatos de tacón para las mujeres en la oficina había sumado más de 100.000 firmas al cierre de esta nota.

Portico, la agencia de trabajo temporal que la envió a PwC dijo en un comunicado que "con efecto inmediato, todas nuestras colegas pueden usar zapatos bajos si lo prefieren".

"Queremos tomar esta oportunidad para mejorar nuestras prácticas".

PwC también tuvo algo que decir.

"PwC pone mucho énfasis en ofrecer un ambiente de trabajo progresivo para toda nuestra gente y creemos que esto debe incluir a empleados que vienen referidos por empresas externas", señaló en un comunicado.

"Estamos revisando los códigos de uniforme de nuestros proveedores para asegurarnos de que son coherentes con nuestros valores".