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CAUSA ABIERTA

Choque "de perfiles" entre líderes de oposición para derrotar al Frente Amplio en 2019

Choque "de perfiles" entre líderes de oposición para derrotar al Frente Amplio en 2019

Juntos pero no necesariamente alineados. Los principales líderes de los partidos de la oposición esbozan iniciativas para conformar un gran bloque que sume fuerzas para derrotar al Frente Amplio en las próximas elecciones, sin embargo, cuando recién asoma la idea, los distintos perfiles de cada uno aparecen como un escollo a tener en cuenta.

El director de la consultora Equipos Mori, el sociólogo Ignacio Zuasnábar, dijo a Búsqueda que la situación que se le presenta a los dirigentes opositores es de “cooperación y conflicto”. “Necesariamente hay cooperación para sacar al otro, pero también hay conflicto” por la competencia entre partidos, explicó. Para Zuasnábar, “lo más importante” que se observa hoy es que hay un “espíritu” para acordar. Luego “deberán ver el formato” que más conviene para concretar ese acuerdo, opinó.

La semana pasada, en entrevista con Búsqueda, el líder del Partido Colorado, Pedro Bordaberry dijo que la oposición, “blancos, colorados, independientes, (y) hasta (el empresario Edgardo) Novick” debían “buscar puntos de acuerdo en algunos temas”. “Mostrar que podemos llevar adelante temas coordinadamente si a cualquiera de nosotros le toca ser gobierno. Si ponemos una agenda de temas sobre los que estamos bastante de acuerdo y empezamos a trabajarlos, nos daría a todos otra presencia con posibilidades de gobernar en el día de mañana. Por ejemplo, la lucha contra la corrupción. ¿Me van a decir que la oposición no está de acuerdo en pensar medidas concretas en la lucha contra la corrupción?”, se preguntó.

Bordaberry afirmó que se deben buscar esas “coincidencias desde ya” pero “sin que nadie pierda su individualidad”. Y agregó: “Los colorados somos distintos al Partido Nacional o al Partido Independiente”. En filas coloradas hay dirigentes que comparten esta visión aunque tienen dudas de cómo llevarla a cabo. “Me parece bien”, comentó el diputado Tabaré Viera, líder del sector Espacio Abierto. “He estado charlando con dirigentes buscado puntos de acuerdos más allá de lo electoral”, dijo. Viera señaló que se debe analizar cuáles son los sectores de la oposición que “pueden coincidir”, porque entiende que no todos tienen visiones parecidas. Este acuerdo, dijo, debe tener una “impronta ideológica”. “Para mí como batllista el papel del Estado es central, debe estar presente y ser el promotor del desarrollo”.

Según dirigentes políticos consultados, uno de los “cortocircuitos” de esta coordinación opositora puede ser la relación entre Bordaberry y el senador blanco Luis Lacalle Pou. A lo largo de los últimos meses, ambos han exhibido diferencias a la hora de tratar diversos asuntos. La semana pasada quedaron claras dos visiones sobre el uso de reservas —planteado por Lacalle Pou— para gastos de infraestructura. Bordaberry replicó que hay que ser “muy cuidadoso” en este tema. Le pidió “responsabilidad” y agregó que no hay que “lanzar ideas que puedan parecer un poco interesantes para estar en los medios”. Las diferencias también se han dado respecto a cómo encarar la comisión investigadora por las pérdidas en Ancap y hasta por el régimen del trabajo en el Senado.

En el entorno de Lacalle Pou opinan que por ahora “hay que tratar de buscar coincidencias en el diagnóstico” de la situación política actual. “Por ahí es donde hay que empezar. No es todos contra alguien porque sí”, dijeron fuentes allegadas al senador blanco. Los informantes agregaron que donde quedó demostrado “diálogo y unidad” de la oposición fue en el tema de Ancap, en la discusión parlamentaria por la Ley de Presupuesto y en la participación de Uruguay en el acuerdo comercial TISA. “Que esto mismo se repita en el futuro”, evaluaron. “Puede no haber afinidades personales, pero lo importante es que exista confianza y se vaya por el mismo camino, como ocurrió con Ancap”, insistieron.

El senador blanco Jorge Larrañaga fue de los primeros en plantear la idea de generar un arco opositor. Y ha mantenido varias reuniones con dirigentes con este propósito. “Hay satisfacción porque la idea ha prendido y supone una opción responsable para construir una alternativa real al Frente”, señalaron fuentes del entorno de Larrañaga. Los distintos perfilismos, por ahora, no parecen ser preocupación para el líder de Alianza Nacional. “Hay referentes de todos los palos. Eso es necesario. No se puede hacer sin las cabezas. En principio es más fácil coordinar entre esos referentes de la oposición que lo que parece. En el Frente Amplio hay más caciques”, dijeron los informantes. Agregaron que la “pluralidad” de dirigentes opositores “puede dar garantía de un cronograma sustentable”. “Una propuesta de alternativa a la actual mayoría no puede partir de exclusiones”, opinó una de las fuentes consultadas.

La senadora blanca Verónica Alonso, en tanto, evaluó que la oposición “tiene que estar unida” pero “no solamente para criticar o denunciar”. “Eso es fácil”, dijo. “Tiene que estar unida para proponer, para instalar agenda. Y ahí no estamos unidos. Ahí empieza el juego del cálculo electoral. Me molestan profundamente los que solo están para el cálculo electoral. Faltan cuatro años. La mejor estrategia es trabajar, incidir, decir yo también soy parte de esto”, señaló, y reclamó “madurez política”. “Para proponer no hay unidad porque ahí empiezan los perfilismos. Si uno se acerca mucho, el otro se aleja, porque hay que marcar las diferencias. Tenemos que terminar con esto. Hay que identificar los temas comunes que se puedan trabajar ahora, ir en esa línea dejando de lado los egos”, propuso.
Otro perfil.

El senador del Partido Independiente Pablo Mieres, reacciona cuando se habla de una oposición en bloque para derrotar al Frente Amplio. Mieres se siente parte de la oposición, pero apuntó que esta no debe verse como algo homogéneo. “El Frente Amplio está en crisis, exhibe agotamiento y tiene diferencias internas abismales. La cuestión es cuáles son las alternativas. Están las opciones que ofrecen los partidos tradicionales y Novick, que representan a la derecha, y también está nuestra opción que es una expresión de centroizquierda”, puntualizó en diálogo con Búsqueda. Mieres fue también uno de los primeros en abrir la cancha para enfrentar al oficialismo. Su propuesta es crear un espacio socialdemócrata que recoja a los desencantados del Frente Amplio. “No es una alternativa antifrentista, es una alternativa que incluye dirigentes y sectores del oficialismo y también de blancos y colorados, wilsonistas y batllistas”, afirmó.
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