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CAUSA ABIERTA

El retiro de Mujica, la venta de marihuana y la ONU marcarán el 2016 en Uruguay

El retiro de Mujica, la venta de marihuana y la ONU marcarán el 2016 en Uruguay

El nuevo año en Uruguay estará marcado por el retiro de su político más carismático, José Mujica, por el comienzo de la venta legal de marihuana en las farmacias y por su rol como miembro no permanente en el Consejo de Seguridad de la ONU, que inaugura hoy junto al de la presidencia temporal del Mercosur.

Si existiese un "star system" político, Mujica, presidente uruguayo entre 2010 y 2015, se equipararía a mitos como Marilyn Monroe, Michael Jackson o Elvis Presley, pero el tiempo pasa y en abril de 2016, a punto de cumplir 81 años, dejará su puesto como legislador.

Según anunció en octubre pasado, esto no quiere decir que abandone "el andar político", pero su nueva posición le alejará de la Cámara Alta para "ejercer de hombre de diálogo y ayudar" en lo que pueda.

Su participación en las décadas de 1960 y 1970 en la guerrilla urbana Movimiento de Liberación Nacional-Tupamaros, la vida presidencial en una "chacra" alejado de los lujos, su perra coja -Manuela-, sus discursos y reflexiones vitales y un carácter que no le permite morderse la lengua, son algunos de los elementos que conforman la fama que le precede.

Precisamente, una de las leyes aprobadas durante el mandato de Mujica -en 2013- y que alimentó la proyección internacional tanto del mandatario como del país, fue la de la compraventa legal de marihuana, la cual empezará a circular, según las previsiones del Gobierno, a finales del primer semestre de 2016 o a comienzos del segundo.

Según el plan, el cannabis legal para uso recreativo -para cuya producción ya hay dos empresas licitadas- llegará a las farmacias uruguayas con un precio de alrededor de 1,2 dólares por gramo, mientras que para el uso medicinal se está avanzando para aprovechar la oportunidad que el marco normativo del país ofrece para el desarrollo de la investigación en ese campo.

Esta medida, concebida por el Gobierno como una forma de luchar contra el narcotráfico y como un camino alternativo a las medidas "prohibicionistas" que en su opinión no han generado resultados positivos, ha despertado un gran interés internacional, tanto en la región como en algunos países del Viejo Continente.

Queda ahora esperar a ver cómo se desarrolla la aplicación de la normativa, que limita a 40 gramos mensuales la cantidad de marihuana recreativa que puede adquirir un usuario registrado en el sistema y en la que el cannabis distribuido lleva unas cantidades limitadas de las sustancias psicoactivas de la planta.

Asimismo, otro aspecto que marcará el devenir de Uruguay en 2016 en el ámbito internacional será su rol como miembro no permanente del Consejo de Seguridad de la ONU hasta finales de 2017, un papel que no ejercía desde que lo hiciera entre 1965 y 1966.

Entre sus aspiraciones en el Consejo de Seguridad, el Ministerio de Relaciones Exteriores uruguayo ha reiterado en múltiples ocasiones que sus objetivos son "ayudar a reformar" el organismo y lograr que una mujer sea elegida para ponerse al frente de las Naciones Unidas tras "70 años de primacía absoluta de hombres".

Otro cargo importante que ostentará Uruguay durante el primer semestre de 2016 será la presidencia temporal del Mercosur, bloque suramericano integrado también por Argentina, Brasil, Venezuela y Paraguay, país este último del que recoge el testigo para ponerse al frente de la institución durante los próximos seis meses.

Sin lugar a dudas, el principal reto que asumirá Uruguay cuando tome la manija de las presidencia del Mercosur será el de encauzar las negociaciones para cerrar el acuerdo de libre comercio con la Unión Europea, el cual, como dijo Mujica recientemente, el bloque viene "bregando desde hace 15 años".

El último varapalo que sufrieron las negociaciones entre el Mercosur y la UE se produjo cuando Francia se negó a iniciar el intercambio de ofertas, algo que manifestó en Bruselas a finales de noviembre el secretario de Estado español de Comercio, Jaime García-Legaz, tras un Consejo de Ministros del bloque europeo.
EFE

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