China se niega a presionar a Irán

China reiteró que la disputa sobre el polémico programa nuclear de Irán no puede ser resuelto a través de sanciones, a pesar de que un comunicado de Washington señalaba que Pekín había acordado colaborar con una nueva resolución de sanciones en Naciones Unidas.Una portavoz del ministerio de Relaciones Exteriores chino afirmó que su gobierno siempre ha pensado que las negociaciones, no la presión y las sanciones, son el mejor camino a seguir para resolver el tema.Con anterioridad, el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, y su homólogo chino, Hu Jintao, habían sostenido una reunión antes de la cumbre que se realiza en la capital de EE.UU. sobre seguridad nuclear.Después del diálogo, Washington dijo que ambos líderes habían dado instrucciones a sus diplomáticos para trabajar conjuntamente sobre potenciales sanciones contra Teherán.El gobierno de Obama resaltó en la cumbre sus preocupaciones sobre el grave riesgo de que material atómico caiga en manos equivocadas y ciertamente sintió que había logrado darle un pequeño empujón a China para que considerara apretarle los tornillos a Irán, explica el corresponsal de asuntos de Defensa de la BBC, Nick Childs.CautelaSin embargo, una lectura más cuidadosa de lo que se dijo en la reunión entre ambos mandatarios da a entender que habrá muchas más discusiones al respecto y que el resultado final es aún incierto.De muchas maneras, añade Nick Childs, es poco lo que ha cambiado el escepticismo chino ante las sanciones contra Teherán y su particular perspectiva hacia ese país, teniendo en cuenta su dependencia de petróleo iraní.No obstante, el ambiente entre Washington y Pekín ha mejorado recientemente, aunque habrá mucha tela que cortar antes de que los dos gobiernos puedan acordar una política hacia Irán aceptable para ambos.Se trata de una complicada danza entre una administración estadounidense impaciente para moverse en dirección de sanciones y un liderazgo chino más cauteloso, señala el corresponsal.Relación delicadaLa buena relación bilateral es clave para los dos países y quizás para el resto del mundo también.Después de varios meses de asperezas exacerbadas por el tema de Taiwán y el intercambio monetario, entre otros temas, Washington y Pekín parecen estar interesados en mostrarse cooperativos y acentuar lo positivo.El hecho de que el presidente Hu haya asistido a la cumbre nuclear es interpretado como una buena señal, recalca Childs, teniendo en cuenta que su presencia estaba en duda.