Contragolpe democrático

El Gobierno de facto de Honduras declaró el toque de queda tras la llegada del presidente depuesto, Manuel Zelaya, al país, informaron los medios locales. Las fuerzas armadas y el golpista Micheletti pasaron un papelón internacional al negar en reiteradas oportunidades la presencia en el país del presidente constitucional depuesto hace 3 meses. El ingreso clandestino de Zelaya, refugiado en la embajada de Brasil, contó con el apoyo de varios países de América Latina en una suerte de contragolpe de estado democrático. Es la primera vez en la historia del continente que se registra un caso de estas características, observaron varios analistas. Varios de ellos, no obstante, temen que el golpista y sus secuaces procedan al arresto de Zelaya lo cual podría derivar en un baño de sangre.