Ola suicida de jóvenes indígenas en ciudad de Colombia: ¿maldición o el infierno moderno que los atrapó?

La 'ola suicida' es explicada desde la antropología, la religión y las tradiciones orales, pero toma mayor importancia pues ocurre en Mitú, una ciudad de apenas 12 mil habitantes. Mientras unos hablan de maldiciones y conjuros de payés (líderes espirituales de los indígenas), otros dicen que los jóvenes suicidas viven su propio infierno debido al consumo de drogas, licor y chicha y por las pocas opciones que tienen para progresar en la vida. Desde el 2006, ya son 22 hombres y mujeres entre los 14 y 34 años de diferentes etnias, que han decidido quitarse la vida. El método es el mismo: ahorcamiento. El vicario de Mitú, monseñor Gustavo Ángel, dice que a los muchachos 'se les metió el diablo'; psicólogos y autoridades achacan el fenómeno a la 'aculturización' que están sufriendo las 23 etnias que habitan en esta región donde se destacan los tucanos, desanos y cubeos. La creencia popular que ha circulado por la ciudad es que esos ahorcamientos son producto de una maldición de un payé porque le mataron a una hija. Dice la tradición oral que unos muchachos 'alegres y toma trago' emborracharon a un Payé y a su esposa, mientras se llevaban a su hija para violarala. Supestamente ésta murió desangrada. La población se encuentra dividida entre aquellos que creen en la maldición y quienes piensan que es absurdo darle crédito a una historia sobrenatural. La Alcaldía, el ICBF y las Secretarías de Salud del municipio y del Vaupés, están adelantando con sicólogos y trabajadores sociales una campaña para inculcarles a los jóvenes el respeto y el amor por la vida. Mauricio Álvarez, secretario de Gobierno de Mitú, sostuvo que el trabajo compromete el casco urbano y la zona rural de esa capital y que con actividades deportivas y jornadas que abren espacios para la reflexión, la recreación y las actividades culturales, se buscará frenar esa 'epidemia' de jóvenes ahorcados. Aunque las autoridades civiles y muchas instituciones en Mitú se resisten a creer que los 22 suicidios de indígenas de distintas etnias sean producto de la maldición de un payé, tuvieron que acudir a tres de ellos para que convenzan a los jóvenes que no se sigan ahorcando. El plan de contingencia propuesto por las autoridades contempló la necesidad de convocar a los payés o médicos tradicionales, durante cinco días, para que hicieran un ritual en contra de ese problema. "El consejo regional indígena nos apoyó en eso y nos colaboró para decidir que los payés de esta zona hicieran sus rituales, porque de alguna manera estos varían entre cada etnia", explicó Rocío Gómez, sicóloga del municipio de Mitú. La profesional dijo que los jóvenes indígenas todavía tienen muy arraigado el respeto por los payés y creen mucho en las maldiciones y maleficios que estos personajes pueden impartir. "El problema radica en que no hay profesionales especializados como sicólogos y siquiatras para ayudarles a los indígenas a superar los problemas", dijo la personera de Mitú, Edna Liliana Hernández. (El Tiempo)