Irán: un muerto en enfrentamientos entre partidarios de Ahmadineyad y Musavi

Los enfrentamientos entre partidarios del presidente de Irán, Mahmud Ahmadineyad, y del ex candidato presidencial Mir Hosein Musavi en Teherán por los resultados de las elecciones del viernes, que dan la victoria a Ahmadineyad, se han saldado con al menos una víctima mortal por los disparos realizados contra los simpatizantes de Musavi por hombres armados que también han herido a varias personas. Entretanto, el recurso presentado por el político reformista contra la reelección del presidente fue aceptado por el Consejo de los Guardianes, que anunciará su veredicto dentro de, como mucho, diez días. Según un fotógrafo iraní, al final de la manifestación, a la que asistieron decenas de miles de personas para pedir la anulación de los comicios pese a que estaba prohibida por el Ministerio del Interior, un grupo atacó un edificio en el que había miembros de la milicia religiosa Basij, que abrieron fuego contra los agresores, matando al menos a una persona e hiriendo a varias más. Por el momento no hay confirmación oficial de víctimas. Un reportero de la cadena Press TV, financiada por el Gobierno iraní, dijo que después de que se escucharan los disparos pudo verse a algunas personas salir del lugar corriendo. Además, afirmó haber visto a varias personas armadas, aunque señaló que no sabía exactamente quiénes eran o a qué grupo pertenecían. "Han empezado a disparar a la gente, provocando el caos en la plaza Azadi", indicó.

MUSAVI PARTICIPA EN LA MANIFESTACIÓN

El propio ex primer ministro Musavi apareció ante sus seguidores, ataviados con el color verde de su campaña electoral. Es la primera vez que aparece en público desde que el Consejo de Guardianes anunció la reelección de Ahmadineyad por más de un 30 por ciento de los votos de diferencia --un 62,6 frente a un 33,75--. En medio de riadas de gente que abarrotaban las calles del centro de Teherán, Musavi, acompañado de Mehdi Karubi, otro ex candidato reformista, se encaramó al techo de su vehículo y exigió la repetición de los comicios, al tiempo que se mostró dispuesto a participar en una nueva votación. "Estamos dispuestos a participar en unas nuevas elecciones presidenciales. El voto de la gente es más importante que Musavi o que cualquier otra persona", destacó. Durante la manifestación, los simpatizantes del ex aspirante a la Presidencia corearon frases como "¿Dónde está el 63 por ciento que votó a Ahmadineyad?", "Si Ahmadineyad sigue en la Presidencia, seguiremos protestando todos los días", "Luchamos, morimos, no aceptaremos este fraude electoral" o "Muerte al dictador". Los manifestantes recibieron el apoyo del ex presidente Mohamed Jatamí, quien aseguró que estaba "decidido a participar en la manifestación pacífica" para expresar su "protesta" por el "agravio hecho al pueblo y a la revolución". Pese a la prohibición de la marcha, "vosotros y nosotros continuaremos con este movimiento en curso y esperamos que se escuchen las claras demandas del señor Musavi, que son las demandas de todos nosotros", agregó en un comunicado. El reformista Jatamí, quien gobernó el país entre 1997 y 2005, afirmó que "lo que ha ocurrido" en las elecciones supone "una mancha en la confianza de la población y conduce a reacciones naturales y emotivas".

MUSAVI Y REZAIE RECURREN LOS RESULTADOS

El Consejo de los Guardianes, el principal órgano legislativo de Irán, anunció que ha recibido oficialmente los recursos de Musavi y del ex director de la Guardia Revolucionaria Mohsen Rezaie contra los resultados de las elecciones y que dispone de un plazo de entre siete y diez días para anunciar una decisión al respecto. Pero Musavi admitió posteriormente en su página web: "He apelado al Consejo de los Guardianes pero no soy muy optimista respecto a su juicio. Muchos de sus miembros no fueron imparciales durante los comicios y apoyaron al candidato del Gobierno". Ahmadineyad y el Ministerio del Interior han rechazado las irregularidades denunciadas por los candidatos opositores, y el líder supremo de Irán, el ayatolá Alí Jamenei, ha pedido a los iraníes que acaten los resultados. Musavi había enviado una carta a Jamenei un día antes de la votación expresándole su preocupación por cómo se iban a desarrollar los comicios. En la misiva, Musavi consideraba que las autoridades no estaban "acogiendo" el importante "movimiento legítimo de la opinión pública" que han generado las elecciones. Durante la campaña electoral, los candidatos movilizaron a miles de personas y la participación en la votación alcanzó el 85 por ciento. Para explicar estas preocupaciones, Musavi aseguraba en su carta que miembros del Consejo de los Guardianes no estaban "cumpliendo la norma de la imparcialidad al apoyar abiertamente al actual jefe de Gobierno" y que el Ministerio del Interior y los gobernadores provinciales estaban "dudando en aceptar" la lista de sus representantes en las juntas situadas en los lugares de recuento de votos. "Su última acción ilegal es retirar a los representantes incluidos por mi oficina en los colegios electorales, lo que creará el caos", añadía, al tiempo que denunciaba que todas estas medidas son un "claro sabotaje que interferirá en el desarrollo de sus tareas". Por otra parte, Musavi denunciaba que, de acuerdo con las informaciones aparecidas en los medios, la Guardia Revolucionaria y los voluntarios islámicos Basij "están interfiriendo" en las elecciones. El ex primer ministro también criticaba la utilización de instalaciones del Gobierno por parte de Ahmadineyad para su "propaganda". "Éstos son sólo unos pocos ejemplos de las medidas que no han hecho otra cosa que generar frustración y decepción en la gente que participa activamente en reforzar los pilares del sistema de la República Islámica con su indescriptible pasión", afirmaba.

PREOCUPACIÓN DE LA COMUNIDAD INTERNACIONAL

Ante una situación cada vez más delicada en Irán, la comunidad internacional ha reaccionado con una postura unitaria. El Alto Representante para la Política Exterior y de Seguridad Común de la Unión Europea. Javier Solana , y el secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki Moon, insistieron por separado en que se respete la voluntad de los iraníes, sin precisar si creen que esa voluntad es la que reflejan los resultados electorales oficiales. El ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación español, Miguel Ángel Moratinos, subrayó su convicción de que le corresponde a Irán "clarificar cómo se han producido las elecciones" y añadió que la UE toma "nota" de los resultados oficiales pero también del "rechazo" de los mismos por candidatos opositores. Tras la reunión de los ministros de Exteriores de los Estados miembros de la UE, reunidos en Luxemburgo, los Veintisiete reclamaron a Irán que "aborde e investigue" las denuncias de fraude electoral en los comicios y expresaron su preocupación por las "dificultades" que tiene "un sector de la población" para "expresar su opinión" sobre los resultados, indicó Moratinos. Estados Unidos, por su parte, reconoció estar "profundamente preocupado" por la violencia surgida tras las elecciones y por las supuestas "irregularidades" cometidas durante las mismas, sobre las que pidió una investigación. "Pedimos a las autoridades de Irán que respeten el derecho del pueblo a expresarse pacíficamente", dijo asimismo el portavoz del Departamento de Estado Ian Kelly. En el mismo sentido se expresaron la canciller alemana, Angela Merkel, y el presidente francés, Nicolas Sarkozy, quienes incidieron en su rechazo a la reacción de las fuerzas de seguridad frente a los manifestantes y a las numerosas detenciones realizadas. Francia incluso ha convocado al embajador de Irán en París para que dé "explicaciones" sobre la reelección de Ahmadineyad.