"Si no se postula Uribe, me postulo yo", dijo al renunciar el Ministro de Defensa de Colombia

El ministro de Defensa, Juan Manuel Santos, acreditado con algunos de los mayores éxitos en la lucha contra la guerrilla, renunció hoy al cargo para lanzar su precandidatura presidencial, la cual condicionó a si el presidente Alvaro Uribe decide o no optar por un tercer mandato consecutivo. Santos, de 53 años, dijo en conferencia de prensa que consideraba cumplida su labor tras casi tres años al frente de la cartera y que ahora se dedicaría a su vida. "Hoy considero que después de este período al frente del ministerio de Defensa es necesario pasar la posta y continuar mi vida de servicio público en otros escenarios. Por lo mismo, con todo respeto, le presento mi renuncia, efectiva a partir del próximo 23 de mayo", dijo Santos al leer la carta que dirigió al presidente Alvaro Uribe. No se mencionó de inmediato quién reemplazaría a Santos, en cuya gestión las fuerzas armadas colombianas le asestaron algunos de los más duros golpes militares a las rebeldes Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC). En la misiva dirigida a Uribe, expuso que "pasaré de ser ministro de Defensa a ser un simple pero decidido promotor de su causa. Me dedicaré, como usted lo hace a trabajar, trabajar y trabajar por la continuidad de la (política nacional de) 'seguridad democrática' en la que no podemos bajar la guardia ni un solo milímetro mientras la bestia del terrorismo siga viva". "Si el presidente (Uribe) decide lanzarse, él cuenta con mi total apoyo. Es el compromiso que yo he hecho con él y con el país y lo voy a honrar. Si él decide no lanzarse a una nueva reelección, yo seré candidato", sostuvo Santos. Uribe no ha dicho públicamente si buscará o no un tercer mandato en los comicios generales de mayo del 2010 y para lo cual primero precisa de una reforma constitucional porque actualmente se permite una única reelección por un mandato de cuatro años. Uribe fue reelegido en el 2006. Desde hacía meses los medios locales citaban insistentemente que Santos renunciaría al cargo, que asumió en julio del 2006, para proseguir una candidatura presidencial y que debía salir de esa cartera porque normas internas colombianas impiden que un aspirante haya ocupado un cargo público en el período de un año inmediatamente anterior a las elecciones. Entre algunos de los éxitos que Santos ha mostrado están la muerte de uno de los más altos comandantes de las FARC, Raúl Reyes, el 1 de marzo del 2008, en una polémica acción en que otras 24 personas perecieron e implicó incursionar a territorio ecuatoriano para bombardear el campamento clandestino en que se encontraba el líder insurgente. En la misma semana de la muerte de Reyes, un guerrillero de bajo rango se entregó a las autoridades militares y dijo que había matado y cortado la mano derecha a Iván Ríos, otro jefe de las FARC, porque temía por su vida debido a roces con el líder rebelde. También Santos encabezó la liberación de un grupo de notables rehenes en poder de esa guerrilla a través de una intrépida operación en la que no se disparó ni una bala el 2 de julio del 2008. Santos encaró otro escándalo cuando miembros del ejército fueron acusados el año pasado de presentar a civiles como supuestos guerrilleros, paramilitares o narcotraficantes muertos en combates. La denuncia desencadenó una investigación interna que desembocó en la purga de más de 20 miembros del ejército, incluidos tres generales. La Fiscalía investiga más de 1.600 posibles ejecuciones extrajudiciales cometidas por militares en los últimos cinco años. Santos dijo que desde que "comprobamos que efectivamente había casos (de ejecuciones)... no nos tembló la mano para tomar determinaciones drásticas y tenía un alto costo político y seguimos en esa política de cero tolerancia a cualquier violación de los derechos humanos".