Sri Lanka: Tigres Tamiles oponen fiera resistencia a avance de tropas gubernamentales

La guerrilla de los Tigres Tamiles de Sri Lanka oponía hoy una fiera resistencia al avance de las tropas gubernamentales, en nuevos combates en el noroeste del país, lanzando incluso ataques suicidas según el ejército. Un portavoz del ejército, Udaya Nanayakkara, explicó que los Tigres de Liberación de Eelam Tamil (LTTE) organizaron un feroz contraataque, lanzando ataques suicidas con barcos a lo largo de la costa, en los cuales murieron al menos 10 guerrilleros. "Hemos rechazado con éxito sus contraataques", explicó Nanayakkara. Varios soldados de las tropas gubernamentales resultaron heridos, pero el ejército no dio más detalles al respecto. Los rebeldes tamiles no comentaron estos ataques y las afirmaciones del ejército no pudieron ser comprobadas ya que el gobierno limita al máximo el acceso de los periodistas, diplomáticos y trabajadores humanitarios a la zona de combate. Los enfrentamientos causaron la muerte de al menos 50 civiles en el bombardeo el miércoles de un refugio que oficiaba de hospital en la zona del conflicto, informó un médico a la AFP. "Por lo menos 50 personas murieron y más de 60 resultaron heridas en el bombardeo", afirmó por teléfono T. Varatharajah, un doctor que trabaja en esta estructura médica en la minúscula franja costera donde están acorralados los rebeldes tamiles junto a decenas de miles de civiles. Sin decir si el bombardeo fue realizado por el ejército o por los rebeldes, el médico agregó que 47 personas murieron la víspera tras un ataque idéntico. Los bombardeos causaron además la muerte de un empleado local de la Cruz Roja, indicó en Colombo el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR). "Uno de nuestros empleados así como su madre murieron esta tarde, fueron alcanzados por un obús", indicó Sarasi Wijeratne, portavoz de la CICR en Colombo. La organización, la única presente en la minúscula franja costera aún en manos de los Tigres de Liberación de Eelam Tamil (LTTE), no precisó la procedencia del proyectil. Sin embargo, los Tigres Tamiles acusaron a las Fuerzas Armadas de Sri Lanka de haber bombardeado esa zona, de 4 km2, con baterías de artillería. Las autoridades de Colombo lo desmintieron y sostuvieron que hace diez días dieron la orden a sus fuerzas de no utilizar artillería pesada en la zona del conflicto, con el fin de no causar víctimas civiles. Ante la brutalidad de los combates, Naciones Unidas calificó la situación de "absolutamente horrorosa". La secretaria de Estado norteamericana Hillary Clinton y su par británico David Miliband llamaron el martes al fin inmediato de los combates en Sri Lanka y a permitir el escape de los civiles atrapados en medio del conflicto. Pero el ejército de Sri Lanka asegura estar a punto de apoderarse de la zona en la cual se refugiaron los rebeldes y que las dos partes están determinadas a luchar hasta el final. El gobierno de Colombo estima que unos 20.000 civiles quedaron atrapados en la zona de combate, escondidos en abrigos improvisados y sin agua, comida ni medicamentos. La ONU habla de 50.000 personas. Según estimaciones de la ONU, 6.500 civiles han muerto y 14.000 resultaron heridos entre finales de enero y mediados de abril, durante la ofensiva final del ejército contra la insurrección separatista. (Mundo)