Rebeldes a la caza del presidente de Sudán, requerido por Tribunal de La Haya

El principal grupo rebelde de Sudán anunció hoy que ayudará a la Corte Penal Internacional (CPI) a detener al presidente Omar al Bashir, luego que ese órgano judicial ordenó su arresto para juzgarlo por crímenes de guerra. 'La CPI carece de un mecanismo para detenerlo, pero nosotros tenemos nuestros propios grandes y poderosos métodos' para lograrlo, declaró el líder del Movimiento Justicia e Igualdad (JEM), Khalid Ibrahim, en entrevista con la cadena árabe de televisión Al Yazira. 'Hay un mecanismo propio del pueblo sudanés, un mecanismo de Justicia e Igualdad y de cooperación con la comunidad internacional. Nosotros colaboraremos completamente con el Consejo de Seguridad (de las Naciones Unidas) y con la CPI', agregó el dirigente. En un hecho sin precedentes, el tribunal de la ONU con sede en La Haya, Holanda, emitió el miércoles una orden de arresto contra al Bashir por su presunta responsabilidad en crímenes de guerra y lesa humanidad, la primera contra un jefe de Estado en funciones.

Sin embargo, el mandatario sudanés desafió a la CPI y dijo que no tiene facultades para juzgarlo. Además, aseguró que los verdaderos criminales son los gobernantes de los países creadores de esa Corte.

La decisión de la CPI generó reacciones encontradas, desde festejos entre los críticos del al Bashir por su actuación en la región de Darfur -donde según la ONU se vive la peor crisis humanitaria del mundo-, hasta expresiones de apoyo de países musulmanes y aliados.

Ante ello, el líder rebelde Ibrahim señaló que lo más probable es que al Bashir no acuda a rendir cuentas ante la CPI, 'como lo hacen todos los criminales de guerra', pero advirtió que con ello 'perderá legitimidad para gobernar' ese país africano.

El Movimiento de Justicia e Igualdad se levantó en armas en 2003 contra el régimen de al Bashir, en protesta contra la pobreza y marginación. El conflicto ha causado más de 300 mil muertos y 2.7 millones de desplazados. Notimex