"Botinera" uruguaya pidió 250 mil dólares de pensión a jugador y el juez la mandó a trabajar

Un juez mandó a trabajar a una joven de 27 año que solicitó una pensión alimenticia de 250.0000 dólares a un futbolista.

La justicia entendió que el reclamo -un 20% de sus ingresos- no era de orden ya que la pareja no estaba casada, no tenían hijos en común, y la mujer había podido estudiar gracias al aporte de quien entonces era su novio. Por lo tanto, dijo la justicia, no hay impedimento para trabajar.

La demandante se basó en el supuesto deber de alimentos entre los cónyuges, el cual " deriva del deber de asistencia económica recíproca de claros contenidos éticos y jurídicos".

Sin embargo, un fallo del Tribunal de Apelaciones consideró que la solicitud era objetable. La mujer sostuvo que no tenía empleo debido a las vicisitudes de la relación. Por ejemplo, que dejó sus dos trabajos para estar junto al deportista.

La mujer basó su demanda en que los cónyuges se deben fidelidad mutua y auxilios económicos recíprocos y considera que el futbolista incumplió los mismos.

Sin embargo, el deportista tuvo gestos que no se compadecen con el abandono.

Luego de romperse el vínculo sentimental, le regaló un auto que había adquirido con anterioridad.

"No existe ningún impedimento para que la actora no trabaje y se procure su manutención: es una mujer muy joven, profesional universitaria, tiene experiencia laboral, no tiene problema de salud ni hijos del matrimonio que le requieran su atención", señala un reciente fallo por unanimidad de los ministros del Tribunal de Apelaciones de Familia de 1er Turno.

La unión además tuvo "escasísimo tiempo de duración, apenas 20 meses", dijo la sentencia.

El fallo fue firmado por los ministros del Tribunal de Apelaciones de Familia de 1er Turno, María del Carmen Díaz, María Lilián Bendahan y Gerardo Peduzzi. Ratificó una sentencia en primer instancia a favor del deportista demandado.