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CAUSA ABIERTA

Dictan 21 años de prisión a brasileño que descuartizó a una joven británica

Un brasileño acusado de asesinar y descuartizar bajo efectos de drogas a una adolescente británica fue sentenciado el jueves a 21 años de prisión por homicidio calificado y ocultamiento del cuerpo de la víctima. El juez Jessair Coelho de Alcántara dictó la sentencia contra Mohammed d'Ali Carvalho Santos, de 21 años, luego de que un jurado de siete miembros lo declaró culpable de matar a Cara Marie Burke, de 17. El jurado decidió rechazar la tesis de la defensa de Carvalho, según la cual, el acusado debía recibir una sentencia reducida debido a que es una persona perturbada mentalmente que actuó bajo los efectos de las drogas. "La sentencia fue más o menos justa", dijo el abogado defensor Carlos Trajano al conocer el fallo. Dejó abierta la posibilidad de una apelación, al señalar que "vamos a analizar la decisión". Carvalho confesó haber matado a Burke el 26 de julio del año pasado a puñaladas en la ciudad centro-occidental de Goiania después de cuatro días de uso continuo de cocaína y crack. El asesinato estremeció a la comunidad por la brutalidad con que mató y luego descuartizó a la joven para empacar el cuerpo en dos maletas, que arrojó en dos quebradas cercanas. Trajano explicó a la AP que con la sentencia de 21 años de prisión, Carvalho deberá pasar ocho años en régimen cerrado y posteriormente pasará a régimen semi-abierto y abierto. "Estará 21 años bajo la tutela de la justicia, pero dependiendo de su conducta podrá comenzar a tener derecho de salir a dormir a casa, salir a trabajar y posteriormente podrá tener libertad condicionada", comentó el abogado. La sentencia incluye 19 años por el homicidio y dos años por el ocultamiento del cadáver. Vestido de camiseta blanca y pantalón de mezclilla, el acusado se limitó a agachar la cabeza mientras escuchaba el veredicto. Durante el proceso, Carvalho narró ante un jurado y una sala repleta con casi 500 personas los detalles macabros del momento en que apuñaló y descuartizó a Burke. Afirmó que el día del asesinato, la británica le pidió dinero, a lo cual el acusado se negó, lo cual provocó una discusión. "Ella dijo que iba a llamar a mi mamá para decirle que yo gastaba todo el dinero que manda en droga", relató Carvalho. Posteriormente, la joven amenazó con decirle a un amigo policía que viniera a quitarle las drogas para venderlas. La madre de Carvalho, Ivanni dos Santos Carvalho, está radicada en Londres, desde donde le manda dinero al acusado. El fiscal Milton Marcolino refutó la versión de que Carvalho actuó por un impulso y el efecto de las drogas y mostró mensajes de texto intercambiados por el acusado con sus allegados en los que manifestaba la intención de cometer el crimen desde varios días antes. "No hay ninguna sombra de duda de que el acusado tenía plena capacidad para saber lo que estaba haciendo", aseguró Marcolino, al negar la versión de que se trata de un perturbado mental. Al exhibir una foto del cuerpo descuartizado de la víctima, el abogado aseguró que Carvalho estaba irritado con Burke porque ella se negó a casarse con él como había planeado cuando la invitó a Brasil para obtener residencia británica. Sostuvo que la víctima se negó cuando se percató de la adicción de Carvalho a las drogas. "Cuando (Carvalho) vio que ese libre acceso a la Unión Europea que quería estaba perdido, pese a que le pagó pasajes aéreos a Brasil, resolvió matarla", sostuvo el fiscal. "Fue un crimen completamente premeditado". Estuvieron en el proceso el hermano del acusado, Bruce Lee Carvalho, y su tía Jeane Lucia de Sousa, así como la novia del acusado, Hellen de Matos Victoria, quien en marzo dio a luz un hijo de él. Los tres relataron la relación del acusado con las drogas y aseguraron que pretende someterse a un tratamiento para superar su adicción. (Mundo)

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